Además el día nos acompañó y nos lució un sol espléndido con muy buena temperatura.
También acompañando a esos simpáticos animales
estaban las gallinas, conejos, ovejas y cabras.
Hicimos buenas migas con todos y disfrutamos
de su compañía en libertad.
Les dábamos de comer y les acariciábamos. No
les teníamos miedo ni ellos a nosotros.
Después de visitar la granja nos fuimos a comer a Puente Viesgo, al lado del río y de un puente.
Comimos unos bocadillos que nos habían preparado en el cole que estaban riquísimos.
Cuando acabamos de comer jugamos en un parque que estaba muy cerca en el que había una máquina antigua de tren y unos columpios.
¡La verdad es que fue un gran día para todos!